Zip, la firma australiana “compre ahora, pague después” (BNPL), el rival más pequeño de Afterpay, recientemente adquirido por Square, está uniendo sus perspectivas de crecimiento futuro a la industria de las criptomonedas.
El CEO de Zip USA, Brad Lindenberg, dijo a los asistentes al primer día del inversor minorista de la compañía que “La innovación en torno a las criptomonedas se siente como lo hizo Internet en 1995”. El interés de la compañía en las criptomonedas se ha insinuado anteriormente y ahora se ha materializado en un plan concreto: un proyecto que integra la funcionalidad de comercio de criptomonedas para los usuarios de Estados Unidos y permite a sus comerciantes aceptar pagos de Bitcoin (BTC).
La investigación interna de Zip, que encontró que los usuarios de BNPL tienen un 67% más de probabilidades de comerciar con criptomonedas que los no usuarios, ha reforzado su confianza en la medida. Lindenberg, además, presentó la criptointegración como el siguiente paso natural para una empresa que busca satisfacer lo que él denominó la “dieta financiera de los millennials”.
El cofundador de Zip, Peter Gray, había dicho a los periodistas a principios de este verano que el soporte para el comercio de criptomonedas y la provisión de una billetera digital se encontraban entre las principales solicitudes de los usuarios de Zip, insinuando que la empresa comprende a su “generación más joven de clientes” y que lanzaría productos y servicios. dirigido a ellos.
Además de la funcionalidad de comercio criptográfico y el soporte comercial para pagos BTC, Zip también planea lanzar una función “BitcoinBack” en 2022 para permitir a sus clientes convertir recompensas en efectivo en BTC. Todas estas ofertas están programadas para el lanzamiento en EE. UU. En 2022, pero eventualmente se expandirán a un total de 12 mercados globales, incluido el territorio de Zip en Australia, durante los próximos 12 a 18 meses.
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Como se informó la semana pasada, AfterPay, en sí mismo, ha señalado que es probable que busque servicios de cifrado una vez que el marco regulatorio en Australia sea más transparente. El pionero de BNPL aconsejó a una investigación del Senado sobre “Australia como un centro tecnológico y financiero” que los comerciantes podrían reducir los costos de pago mediante el uso de criptografía y que eludir los rieles tradicionales podría generar eficiencias significativas.